El motor principal del incremento de la tasa de crecimiento ha sido la demanda interna

La empresa de valoración y análisis inmobiliario Tinsa ha presentado las notas de coyuntura económica correspondientes al primer trimestre de 2014. El documento incluye los indicadores macroeconómicos y de actividad inmobiliaria claves para emitir un diagnóstico sobre la situación del mercado de la vivienda en España. Entre ellos se encuentran la evolución del Producto Interior Bruto (PIB), el empleo, las hipotecas, la construcción de viviendas, el mercado de suelo o las grandes operaciones corporativas.

La paulatina recuperación de la economía queda patente en los datos del PIB del primer trimestre de 2014, según se desprende del documento. La tasa de crecimiento interanual alcanza el 0,5%, frente a la caída del 0,2% del trimestre previo. El motor principal de esta evolución ha sido la demanda interna, una buena noticia visto el peor comportamiento del sector exterior, mermado por las bajas tasas de crecimiento que presentan los países centrales del euro. En este sentido, apunta Tinsa, la estabilización del mercado laboral en España es una buena noticia, dada su influencia potencial sobre la reactivación del consumo privado y del crédito.

El descenso de la prima de riesgo ha permitido mejorar las condiciones para los préstamos en la economía real. La facilidad de crédito dispuesta el mes pasado por el Banco Central Europeo favorece la generación de liquidez abundante, necesaria para recuperar el mercado de crédito. Queda por conocer el resultado, en otoño, de los “test de esfuerzo” realizados a la banca y los ajustes finales pudieran ser necesarios para volver a engrasar el circuito del dinero.

Tras haber alcanzado el mínimo histórico mensual el pasado mes de agosto (12.000 préstamos), el número de hipotecas constituidas sobre vivienda se ha mantenido por encima de las 16.000 desde principios de 2014. El último dato disponible, correspondiente a marzo, eleva la cifra a 16.400, que en realidad corresponde al mes de diciembre, debido a la dilación con la que el apunte registral llega a la estadística. Tinsa señala que es esperable que los resultados mejoren a lo largo de este año, en consonancia con la incipiente recuperación del mercado residencial

La compañía advierte en sus notas de coyuntura correspondientes al primer trimestre que la correspondencia entre la oferta de crédito y la demanda solvente es dudosa. “Si no aparecen suficientes proyectos viables que financiar, la ecuación continuará desequilibrada y la incipiente recuperación, comprometida”, apunta la compañía en el documento. “Para no incurrir de nuevo en una burbuja de crédito, las entidades financieras deberían dotarse de mecanismos fiables para evaluar la financiación de proyectos en general, y los inmobiliarios en particular”.

Por su parte, la actividad inmobiliaria empieza a mostrar signos positivos. Las cifras de este primer trimestre han sido buenas por segundo periodo consecutivo, aunque el resultado del conjunto del año pasado arroja todavía un número de viviendas iniciadas negativo: 10.293 unidades menos en 2013 que en 2012. Las cifras de compraventas del primer trimestre no son representativas de la situación real del mercado, ya que en el inicio del año pasado se produjo una bajada coyuntural significativa del número de transacciones por las operaciones que se adelantaron a 2012 ante el fin de las desgravaciones fiscales por la compra de primera vivienda. Esto hace que las variaciones interanuales resulten muy positivas en el primer trimestre. Es más realista analizar el conjunto de 2013 frente al año anterior. El descenso en el número de compraventas fue del 7,3% (33.565 compraventas menos) y del 13,1% respecto al trimestre anterior, último de 2013.

Por lo que respecta al suelo, las compraventas continúan aumentando en las grandes poblaciones. Las bajadas son bastantes moderadas en las localidades pequeñas, por lo que Tinsa estima que se puede empezar a hablar de estabilización.