Contactar

¿Cuál es la relación entre la gasolina y el precio de la vivienda en Estados Unidos?

Un aumento en el precio de la gasolina suele traducirse en un encarecimiento de muchos productos y servicios, ya que es más costoso el transporte. Sin embargo, un estudio señala que en el mercado inmobiliario estadounidense el efecto es justamente el contrario.

Bennie Waller, profesor de finanzas y Real Estate en Longwood, establece una relación entre la gasolina y el precio de la vivienda como consecuencia de los hábitos de desplazamiento de los agentes inmobiliarios que comercializan los inmuebles. Según este investigador, cuando el precio de la gasolina es alto, los agentes tienden a reducir al mínimo los kilómetros que recorren para mostrar casas y el número de veces que las enseñan a los posibles compradores.

Un estudio asegura que por cada dólar que se encarece la gasolina, el precio de las viviendas en venta puede caer hasta 6.000 dólares

Un encarecimiento del precio del combustible incrementa los costes de los agentes inmobiliarios estadounidenses, ya que el país que se caracteriza por un modelo expansivo de ciudad y grandes distancias. Una gasolina más cara representa un incentivo para aplicar descuentos en el precio de las viviendas en comercialización con el objetivo de que se vendan más rápido y no sea necesario enseñarlas tantas veces. Si ahorran desplazamientos, ahorran también combustible. Esta es la conclusión a la que llegaron las dos universidades americanas tras un estudio realizado sobre una muestra de 17.122 viviendas en venta en el centro de Virginia entre los años 1999 y 2009. Durante este periodo, el precio de la gasolina osciló entre 1,11 dólares y 4,12 dólares el galón (3,78 litros). Los investigadores matizan que existen diferencias en el comportamiento de los agentes en función de su veteranía.

Aquellos con más experiencia pueden asumir mejor este incremento del precio de la gasolina porque suelen realizar más transacciones a lo largo del año, mientras que aquellos que acaban de empezar no tienen una gran cantidad de compraventas con las que diluir estos costos extras. Con esta premisa, el estudio apunta que si el precio de la gasolina se encarece un dólar, los agentes inmobiliarios más experimentados aplican en promedio una rebaja de 4.000 dólares en la vivienda en venta, mientras que si el agente es joven, la rebaja se incrementa hasta superar los 6.000 dólares.

A la vista de esta experiencia, ¿qué se puede esperar del mercado inmobiliario de Virginia? Parece que los agentes no van a estar demasiado presionados. Según las previsiones de la Administración de Información de Energía de Estados Unidos, el precio por galón en 2015 será de 2,42 dólares y en 2016 se reduciría a 2,38 dólares.

Posts relacionados