Contactar

Me han vendido un piso con aluminosis: qué hacer

Building exterior Wall damaged by water leaks. Rain Water leakage
Si te han vendido un piso con aluminosis vamos a explicarte qué es esta grave “enfermedad del hormigón” de ciertos inmuebles de segunda mano, qué hacer si ya has comprado un piso afectado y cuál es su impacto en el valor del inmueble.

¿Qué es la aluminosis?

La aluminosis es un problema estructural grave que afecta a construcciones de entre las décadas 50 y 70 al utilizarse cemento aluminoso en vigas y elementos estructurales (desde 1977 está prohibido su uso). Se trata de un material que lleva una alta concentración de aluminio, lo que provoca importantes cambios químicos cuando hay altas temperaturas y humedades, sufriendo una pérdida progresiva de resistencia con el paso del tiempo.

Por eso, es clave evitar adquirir una propiedad afectada sin la información adecuada.

Cómo detectar aluminosis antes de comprar un piso

La aluminosis no siempre es visible a simple vista y, aunque lo fuera, en la mayoría de los casos ni el comprador ni el vendedor son conscientes de su presencia.

Las señales más habituales son:

  • Grietas en techos o vigas.
  • Desprendimientos de hormigón.
  • Óxidos visibles en armaduras metálicas.
  • Deformaciones o sensación de inestabilidad.

Sin embargo, estos síntomas de la “enfermedad del hormigón” pueden pasar desapercibidos o confundirse con otros daños menores.

¿Qué hacer si me han vendido un piso con aluminosis?

Descubrir que el piso recién comprado sufre aluminosis genera muchas dudas. Las principales tienen que ver con la responsabilidad legal del vendedor y las posibles soluciones técnicas.

Si la aluminosis no fue advertida por el vendedor y no aparece recogida en el contrato, el comprador puede:

  • Reclamar judicialmente al vendedor para exigir la reparación, una indemnización o incluso la resolución del contrato.
  • Presentar la reclamación en un plazo de seis meses desde la compra, aunque este plazo puede variar si se demuestra que el vendedor actuó de mala fe.

La mejor opción en estos casos es consultar a un abogado especializado en derecho inmobiliario y reunir toda la documentación: contrato, informes técnicos, tasación, etc.

Tratamiento de la “enfermedad del hormigón”

No es sencillo ni barato. Existen soluciones parciales, como el refuerzo estructural de las zonas afectadas (vigas, techos, forjados), o integrales, como la sustitución de elementos estructurales. Y es que, en algunos casos, incluso se ha declarado la ruina técnica del edificio y ha tenido que ser demolido.

Ejemplos de inmuebles afectados por la aluminosis son el Estadio del Atlético de Madrid, el Vicente Calderón, por su cercanía al río Manzanares, o el barrio Turó de la Peira en Barcelona, donde se derribaron más de 50 bloques y cerca de 150 fueron rehabilitados.

El coste depende del grado de afectación y del tipo de intervención necesaria..

¿Cuánto se devalúa un piso con aluminosis?

El impacto en el valor de mercado puede ser muy significativo, alcanzando la devaluación hasta la mitad del valor de mercado. Esto se debe a la inseguridad jurídica, el coste de las reparaciones, la pérdida de atractivo para el comprador y los problemas para conseguir financiación. Y es que, los bancos suelen rechazar la concesión de hipotecas sobre pisos con aluminosis, lo que limita aún más la demanda y, por tanto, el valor de mercado.

¿Vale la pena comprar un piso con aluminosis?

Algunos inversores o compradores informados adquieren pisos con aluminosis con un descuento importante y con intención de reformarlos o invertir en su rehabilitación. Pero para el comprador medio, esto no es una operación rentable por:

  • Costes de reparación muy elevados.
  • Dificultad para conseguir financiación hipotecaria.
  • Problemas para asegurar la vivienda.
  • Limitaciones para revenderla en el futuro.

¿Se puede alquilar un piso con aluminosis?

Esta es una pregunta frecuente en casos de propietarios afectados, y desde el punto de vista legal, sí se puede alquilar un piso con aluminosis, pero con condiciones.

La Ley de Arrendamientos Urbanos obliga al arrendador a garantizar que la vivienda es habitable y segura. Si el inmueble presenta un riesgo estructural, el propietario podría incurrir en responsabilidades legales si no informa al inquilino o no realiza las obras necesarias.

Lo cierto es que muchos inquilinos rechazarán alquilar un piso con este tipo de patologías por el temor a posibles derrumbes o problemas derivados.

Como se aprecia, la aluminosis no es un problema menor y sus consecuencias pueden ser muy costosas. Si estás pensando en comprar una vivienda, especialmente de cierta antigüedad, asegúrate que no padece la “enfermedad del hormigón”.

Posts relacionados