Te explicamos las características principales de una vivienda protegida tal y como lo recoge la legislación
La vivienda protegida es un tipo de inmueble cuya tipología, dimensiones y precios están reglamentadas por la Administración, como condición para poderse acoger a determinadas ventajas tanto económicas como fiscales por parte de los compradores, los cuales a su vez deben reunir unas condiciones establecidas en cuanto a titularidad de inmuebles, ingresos familiares, etc.
Como es lógico, el precio de la vivienda protegida siempre será inferior al de la vivienda libre, no obstante, la vivienda protegida tiene una serie de restricciones:
- Tiene que ser destinada a vivienda habitual, estando regulado su uso durante todo el tiempo que dure el régimen de protección.
- Está limitado el precio máximo de venta o renta así como los ingresos máximos de los compradores/inquilinos./li>
Estás características dependen del tipo de vivienda protegida, del municipio donde se encuentre la misma y de la legislación que haya en vigor en el momento en el que la vivienda protegida obtenga la “calificación provisional”<